lunes, 10 de noviembre de 2014

¿Quien es el Señor, que ha hecho?







Un interprete de la Ley que quiso probar al Señor Jesús preguntandole "Maestro, haciendo que cosa heredaré la vida Eterna?" El Señor le contestó con la Parabola del Buen Samaritano y he recordado la respuesta final del Señor a este hombre:

¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó en manos de los ladrones?
Él dijo:
--El que usó de misericordia con él.
Entonces Jesús le dijo:
--Ve y haz tú lo mismo.

Lucas 10:36-37



Os preguntaréis en que estoy pensando, y es que viendo todo lo que debemos al Señor, y sabiendo que no podemos devolverle nada de lo que el ha hecho por nosotros, solo me siento confrontada ha hacer lo mismo que el hace conmigo.


Y me diréis que eso es imposible, y realmente a mi también me lo parece pues no sabéis cuanto me cuesta ser paciente, pero el Señor nos dice VE, Y HAZ TU LO MISMO!, y Wow de repente me vino a la mente que el Señor no me pediría algo que él no me hubiera dado antes, y he corrido a buscar en mi Biblia y he encontrado, he recordado.... "cuan olvidadiza soy Señor", recuerdo que el me ha llenado de su Espíritu y que este produce unos frutos en mi, y adivináis que? la Paciencia y el amor están entre esos frutos.


El Señor no solo no me pide algo que yo no pueda hacer, sino que me da algo que el tiene ya, él es todo amor, él es toda paciencia, y muuchas cosas más que forman parte de su Espíritu, por tanto cuando él me llenó de su Espíritu es cuando el me capacitó para ser como él, su esencia está en mi. Solo que muchas veces me alejo, no le busco, y entonces vuelvo a repetir el circulo vicioso de caída, arrepentimiento y volver a levantarme, y cuando vuelvo a él y vuelvo a sentir en mi todo su amor, toda su misericordia conmigo, siento de nuevo todo el agradecimiento que eso produce en mi.


Padre mio, perdoname! cada vez que mi ira se despierta, cada vez que mi falta de amor, misericordia, paciencia, se muestran ante alguien que me ofende, estoy demostrando cuan ingrata soy contigo, tu que me has dado todas estas virtudes para que muestre tu carácter! Tu que me has llenado y quieres que yo refleje todo ese arsenal de virtudes a mi alcance, para tu gloria!! Vuelvo a caer rendida ante ti y reconozco que Tu eres mi Dios Grande y Perdonador, Lento para la Ira y Grande en misericordia! y te exalto Padre por amarme así! Amén!